-¡Señoras y señores! ¡Nyororos y nyororas! ¡Keronenses y keronensas! ¡Alienígenas de toda clase, estoy presentando el mayor de los concursos... El Concurso de Aliens!
-Mmm... Parece interesante, voy a fisgonear...-dije.
-Ahora empezaremos a decir las 5 pruebas:
- La prueba del guerrero. ¡El más fuerte gana!
- La prueba de los chistes. ¡El más divertido gana!
- La prueba de las monadas. ¡El más mono gana!
- La prueba de los hechizos. ¡El más mágico gana!
- La prueba del cerebro. ¡El más listo gana!
Ahora empezaremos con los Nyororos, ¿hay algún voluntario? ¡Formad equipos! Más o menos esto durará una hora, así que... ¡Ponéos cómodos! Los keronenses irán después, así que id formando equipos. Y.... ¡Que empieze el concurso!- dijo el presentador.
-¡Ostras, si empieza dentro de nada!-dije.
Fuí a buscar a los demás. Giroro estaba hablando con la tropa Keroro.
-¡Her-hermano! ¡Apuntémonos al Concurso Alien!-propuse.
-¿A qué? No me gustan los concursos.-dijo Giroro.
-¡Pero el premio es o un aumento del 300% de la paga o cien maquetas diferentes de Capitán Geroro! ¡Tenemos que conseguir el aumento, así podremos reformar el barco!-dije.
-Cien maquetas...-dijo Keroro.
-Oh, no, mi Sargento... ¿No sería mejor el aumento de la paga?-propuso Tamama.
-No, Tamama... Ni con un aumento del 500% me llegaría para tantas maquetas...-dijo Keroro.
-¡Wow, así que sois absolutamente pobres! Llevás cinco años sin conquistar Pokopén, normal que os la bajen al mínimo...-dije.
-¡WooooooooooooooooooooooOoooooooooooo! Te vamos a machacar, ¡Kururu, a la prueba de la inteligencia! ¡Tamama, a la prueba de las monadas! ¡Yo voy a la prueba del guerrero!-gritó Keroro.
-¿Y servidor?-dijo todo triste Dororo.
-¿E-estabas aquí? Emmm... ¡A, sí, estabas aquí, claaaro, tú a la prueba de los chistes!-dijo Keroro.
-¡Siempre os olvidáis de un servidor, buaaaaaaa! ¡Por qué tiene que ser a la de chistes!-gritó Dororo.
-Po-porque... ¡ERES EL MÁS GRACIOSO DE LA TROPA!-dijo Keroro.
-¿Ah, sí? ¡Vos me llenáis de dicha!-dijo Dororo muy contento.
En el concurso...
-¡Os presentamos a los participantes de la prueba del guerrero! En el equipo Giroro... ¡Giroro! y con el equipo Keroro... ¡Keroro! ¡Que empieze el combate!-dijo el presentador.
-¡Yaaaaarg! ¡Rayo Dangale!-dijo Keroro.
Y entonces, antes de que disparase, Giroro le lanzó una granada. Tras la explosión, Keroro apareció lleno de cenizas y con una peluca afro y dijo:
-Ay, mamá rana...
-Bah, era pan comido...-dijo Giroro.
-Uh, parece que ha durado menos de lo que esperábamos...¡El ganador es Giroro, un punto para su equipo! ¡Ahora, la prueba de chistes! Con el equipo Giroro... ¡Gimimi! Y el concursante del equipo Keroro... ¡Dororo!-dijo el presentador.
-Seré tan breve, que ya he acabado.-dijo Dororo.
Todos nos quedamos hechos polvo de lo aburrido que era.
-Emmm... ahora Gimimi...
-Era un señor un bote de kétchup en cada oreja... ¿Alguien me sabe decir qué hacía? ¿No, nadie? Pues veréis, estaba... ¡Escuchando salsa!-dije.
No era del todo gracioso, pero les consiguió arrancar una sonrisa. Hasta que un espectador dijo:
-¡Otra, otra!
-¿Otra queréis? Vale... Doctor, doctor, creo que tengo paperas. Y el doctor va y dice... ¡Pues tome dos euros y ya tienes pa plátanos!-dije.
-¡Ja, ja, ja, ja!-reían todos.
-¡La ganadora es Gimimi! ¡Un punto para su equipo! Ahora, la prueba más cuca... ¡La prueba de las monadas, con Lanito en el equipo Giroro y su contrincante Tamama en el equipo Keroro!-dijo el presentador.
Tamama venía despacito al estenario, puso sus ancas en los mofletes, y dijo:
-¡Tamaaaaaaaaaaaa!
-OooOoooOooHhHh...-decía el público.
Pero, Lanito, entró rodando como una bola esponjosa, dió un salto en el que salió de la bola y dijo:
-¡Lanitoooooo, soy muy achuchable! ¡Quiero daros a todos un abrazo! ¡Laniiiii!-dijo Lanito.
-¡OOoooooOOOOOOOOOoooooh! ¡Parece un peluche pequeñito!-decía el público.
-A ver, ¿Quién decís que gana?-decía el presentador.
-¡Lanitooooooooooooooooooooo!-gritaba el público.
-Y el ganador es... ¡Lanito!- decía el presentador.-Ahora, la prueba de mági... ¡Oh, me informan de que falta un concursante en el equipo Keroro! Entonces solo podemos dar el punto a la Tropa Giroro...-dijo el presentador.
-Eh... ¿Y Ondanda, y Giroro? ¡Sin Ondanda perderémos!-dije.
-Ya estoy aquí... Pero no puedo concursar porque estoy fatal...-dijo Ondanda mientras casi se caía.
-No te preocupes, nos retiramos, total, ya ganásteis cuatro de los cinco puntos... ¿Qué posibilidades hay? Adiós a mis maquetitas...-dijo Keroro.
-¡Eh, tío, que pasamos de esto!-decía Kururu al presentador.
-Va-vale... Entonces el equipo ganador es el Equipo Giroro... ¡Felicidades!-dijo el presentador.-¿Qué premio queréis?
-Elegimos el aumento del sueldo. ¿De qué nos ayudarán unas maquetas?-dije.
Entonces, en ese momento, vino Giroro.
-¡Gimimiiiiiiiiiii! ¡Ya estoy aquí!-dijo Giroro.
-¡Oh! ¿Usted es el líder del equipo? Por favor, recoja este trofeo y dale a su jefe esta tarjeta.-dijo el presentador.
-Hummm... ''A los primeros ganadores del primer Concurso Alien de la galaxia en la categoría keronense les otorgamos este trofeo. ¡Felicidades! 20/07/2010.'' y en la tarjeta pone... ''Premio del concurso Alien, aumento de un 300% del sueldo a todos los participantes del equipo''... ¡WoW! ¡Ahora cobraré 300.000 yens!-dijo Giroro.
Y lo celebramos con una gran fiesta en un restaurante de sushi giratorio de lujo, el plato más barato costaba 2.000 yens y el más caro 10.000, estaba todo muy bueno.
-¡Mmm! ¡Qué rico está este sushi! ¡Ñam, ñam!-dijo Lanito.
-La comida pokopense es bastante buena. ¡Ñaam!-dije.
-Eso me recuerda a un día en el que Keroro y los demas fuimos a un restaurante de sushi giratorio, estaba muy bueno. Keroro traía unos papeles de descuento, pero estaban caducados y al final Keroro fue el que más comió y tuvo que pagar mucho. ¡Ja, ja!-dijo Giroro.
-Eso le pasa por no mirar cuándo caduca.-dije.
-Ondanda, ¿estás mejor?-dijo Kihuhu.
-Sí, creo que era que tenía hambre, esta vez no desayuné ni almorcé por que casi había acabado la pistola de Gimimi.-dijo Ondanda.
-¡Perdón, fue culpa mía!-dije.
-No te preocupes, la culpa es mía, podría haber hecho un descanso, pero no lo hice porque estaba muy ensimismado.-dijo Ondanda.
Nos lo pasamos de miedo y al final solo tuvimos que pagar 100.000 yens, ahora ese dato ya no importa. ¡Uf, tenía la barriga llenísima!
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